El futgol de Pedro Lemebel
A Pedro Lemebel, los cabros chicos no le pasaban la pelota en el patio de la escuela por ser poco hombre. Por ser —como él mismo se definió— un mariposuelo evidente. Muchos años después, en 1986, recitó su poema Manifiesto (hablo por mi diferencia), en una acto organizado por la izquierda en Santiago: 'Mi hombría fue la mordaza/ no...